Dicta un refrán popular: ¡Es de bien nacido ser agradecido!
¡Dar las gracias, es tan sencillo y tan sumamente eficaz!
Desde que te levantas hasta que te acuestas, he incluso dormid@, estás llen@ de motivos para estar agradecid@.
Todos somos luz. Todos vibramos de una manera más alta o más baja dependiendo de nuestro estado anímico. Según como estemos vibrando atraemos, cosas, personas, situaciones, exactamente de la misma vibración. Son principios universales que nunca fallan. Podéis investigar sobre el tema, en internet por ejemplo hay mucha información buena referente a ello.
Bueno, como iba diciendo, entonces, cada vez que decimos gracias, elevamos nuestra vibración. Es como un mantra que nos lleva a nuestro interior, a contactar con nuestra parte más sabia y a permitir que las cosas empiecen a fluir de otra manera. No me creáis, probadlo, y sed constantes. Veréis los resultados.
Confía
Dar las gracias por lo que nos agrada es muy fácil. Lo interesante y también eficaz es dar las gracias cuando lo que sucede se escapa a nuestro entendimiento y no es como a «nuestra personalidad» le gustaría que fuese.
Si estamos agradeciendo con frecuencia, o siempre que nos acordemos, la paz que ya somos empieza a manifestarse. Si la mente comienza a marear, le decimos amablemente que se calle y se lo agradecemos. En breve comenzaremos a confiar y aceptar, lo que no significa resignarse, sino sentir nuestra presencia, para ser conscientes de lo que la vida nos trae en ese momento, sin renegar. El resultado es poder actuar desde el corazón, realizando lo que sintamos más adecuado. Como lo hacemos «desde otro lugar», los efectos serán completamente distintos a todos los niveles.
Confía que la vida te trae siempre lo que es mejor para ti, como dice Emilio Carrillo: «lo que es más adecuado para el proceso conciencial que estás viviendo en ese momento».
Cuando vives sin pretender escaparte de nada, sucede que ese dolor, rabia, angustia, tristeza, miedo, soledad…se transmutan, integran, y disuelven. Todas esas emociones, se sienten reconocidas y de alguna manera amadas.
«Milagrosamente» las experiencias de cada día se tornan más agradables, lo que te lleva a una vida más fácil.
Todo ello porque tu has decidido retomar tu gran poder interno y ponerlo en práctica, en este caso con la gratitud.
Si lo empiezas a utilizar y a ver resultados ya me contarás.
Recomiendo el libro: Gratitud, de Louise L. Hay
Si crees que le puede ser útil a alguien más puedes compartirlo.
¡Gracias! ?
Abrazos: Mari
Nota informativa
El presente artículo lo escribí hace dos años para mi anterior web, ahora lo he actualizado y lo incorpo como inauguración de esta nueva web hecha con muchísimo amor, inversión de tiempo y esfuerzo, dedicación, entusiasmo, paxión, creatividad…
Estoy muy contenta por los resultados, por todo lo que me ha aportado durante su creación y me está aportando en cada momento. ? ¡GRACIAS!
Créditos de imagen: Foto de Estela Shaddix en Unsplash